Desde qué mi hijo comenzó tercero de primaria, al profesor se le ocurrió que era un buen momento para trabajar la autonomía, a partir de este nuevo curso, el niño era el responsable de preparar los libros que tendría que llevar a casa para hacer los deberes.
Para ello, el profesor entregaba a los niños a principios de cada semana un plan de trabajo y ellos, y sólo ellos, se harían cargo de recoger cada día el material necesario para tal menester...
Como os podéis imaginar las primeras semanas eran un KOS constante, no sólo se le olvidaban los libros, si no que también se dejaba el plan de trabajo, a día de hoy y tan sólo a pocos semanas de fin de curso, aún seguimos luchando por saber qué libro nos falta y cual será el examen de mañana, menos mal que existe el whatsapp de grupos de madres aburridas que están deseando recibir peticiones para que la cola de whatsapp se aproxime a unos 25 por día, y tienen la paciencia de hacer fotos del libro que toca para poder estudiar a través del iPad.
Como no pienso pasar esta penitencia otro curso más, he pensando una idea perfecta, cada lunes cuando a mi hijo le entreguen el plan semanal tendrá que escribirlo en un vinilo de pizarra que he comprado y se lo he puesto justo detrás de su mesa de estudio, así de esta manera aunque olvide el plan , lo tendremos como copia en casa.
Cada mañana podemos repasar los libros que se necesitarán y además subrayar los exámenes.
Cada mañana podemos repasar los libros que se necesitarán y además subrayar los exámenes.
De momento lo utilizaremos para recordar las tareas de verano que son más amenas, dinámicas y divertidas.
Y aquí van las fotos de como quedó:
Espero que os haya gustado.
Hasta pronto!
No hay comentarios:
Publicar un comentario