Hacía tiempo que no escribía un post, pero la verdad es que llevo un verano movidito, ya os iré contando.
Hoy os quería enseñar lo que ideé para no tener que trabajar tanto en la sobremesa, y sí, tengo que reconocer que soy de aquellas maniáticas que tienen que recoger toda la mesa antes de tomar el postre o un café después de comer, así que pensé que si tenía más a mano la mesa la máquina del café y las tazas, me será más cómoda la sobremesa.
Y en cuanto tuve la ocasión, me compré una mesa que hacía tiempo había ojeado y aunque cuando la vi no tenía muy claro para que la iba utilizar, en cuanto pensé en la mesa de apoyo, me vino a la cabeza..
Lo tenía todo muy claro se aproximaba el fin de semana, y pensé, el sábado voy a comprar la mesa que hacía tiempo había fichado, y ese mismo día, a la hora del mediodía, lo tendría todo preparado para darle uso.
No sólo me serviría para el café, ya que también, completé el nuevo look con una estantería de forja para las chuches dándole un aire más campestre.
Y aquí tenéis el resultado:
Espero os haya gustado.
Hasta pronto!
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